TERCERA PARTE
Mariano estaba en su oficina, viendo algunos asuntos de rancho
Buenaventura, entre papeles y documentos que estaba buscando, encontró la
cajita donde tenia el dije que pensaba regalarle a Camila el día que había
decidido pedirle que fuera su novia. El dije seguía intacto, sin ser jamás
usado y ante los ojos de Mariano, ninguna mujer era digno de usar ese dije mas
que Camila. Y ahora por la situación que estaba pasando con Daniel, estaba mas
dispuesto a que ese dije colgara del cuello de su única dueña.
Mientras tanto en la Mal Querida ,
Camila estaba ya mas calmada, había dejado de llorar y aunque sus ojos
mostraban claramente que había estado llorando, su estado de ánimo era otro.
Sentada sobre las piernas de Daniel y reposando su cabeza sobre su hombro,
Daniel le acariciaba la pierna con suavidad con su mano izquierda, y con la
derecha la sostenía de la espalda.
-Tenemos que ir al Doctor para que te revise y te den todo, lo que
necesites para que este chiquito ( le dijo mientras le tocaba el vientre)
crezca sano y muy fuerte.-
-Como su papá. Sano, fuerte y Guapo!- le contesto Camila.
-Habrá que ver, por que si es una niña, quiero que sea idéntica a ti,
una mini Camilita.. pero no importa si es niño o niña, quisiera que saliera
con tu fuerza y tu carácter, eres una mujer admirable y por eso me tienes loco.
Camila le respondió su halago con un beso, sus palabras le hacían sentir
amada, despejaban cualquier duda de saber si en el corazón de Daniel todavía
estaba ella.
-Daniel, ¿Qué fue lo que amaste de Miriam?
Daniel titubeando un poco y lanzando un suspiro, como tratando de
recordar o poner en palabras lo que había sentido por ella, miro a Camila a los
ojos y le dijo:
-A Miriam la ame por su delicadeza y ternura, ella a diferencia de
contigo, hizo que me enamorara con sus detalles y atenciones.
Camila sonrío, recordando como ella se porto todo lo contrario,
evadiéndolo, tratándolo mal y ni hablar de los detalles nulos que Camila le
dio.
-Esto va a ser difícil mi amor, pero nuestro amor es indestructible, y
tal vez este es uno de tantos mas obstáculos que vienen por delante, pero no
debilitan mi amor por ti, si no por el contrario, me atan mas fuerte.
Camila con una mirada incrédula le pregunto
-Tengo miedo Daniel, por que se que hoy me amas, tus ojos me lo dicen,
pero tengo miedo que ese amor se apague
como se apago el de Miriam… Estoy segura que a ella la amaste como a mi y tu
amor por ella no fue indestructible.-
-Pero hay una gran diferencia Camila. Con Miriam, todo fue perfecto en
un principio, sin tropiezos sin obstáculos. Contigo se han creado cimientos a
prueba de todo, por eso estoy seguro que lo que estamos contrayendo aquí es mas
fuerte y nada ni nadie lo podrá derrumbar.
Después de esas palabras, Camila sintió un gran alivio y una
tranquilidad como hacia unos días desde que Miriam llego al rancho, no había
podido sentir.
Se mantuvieron ahí sentados abrazados por un rato más, deseando que no
pasara el tiempo. Un rato después el momento se rompió cuando tocaron a la
puerta de la cabaña de Camila, detrás se escucho la voz de Rodolfo que le
preguntaba si podía pasar, Camila acepto y sin importarle que aun seguía
sentada sobre las piernas de Daniel, Rodolfo entro de prisa sin darle
importancia a la presencia de Daniel, le dijo apurado que algo estaba pasando
con los toros, que habían encontrado 5 toros muertos. Camila se levanto
inmediatamente para tomar las riendas del problema mientras que Daniel,
preocupado, solo le dijo que tuviera
mucho cuidado, mientras la veía salir de la cabaña.
Mariano iba llegando a la
Malquerida cuando vio a Camila pasando de prisa junto a
Rodolfo, ella al verlo lo saludo con apuro y le contó que algo estaba mal, el
la acompaño a los corrales.
Mientras tanto Daniel regreso a la casa, en la sala se encontró con
Dante, y para su sorpresa estaba con Ágata jugueteando con un muñequito que
mantenía a la bebe muy entretenida. Daniel se detuvo a observar el panorama,
Dante se veía muy cariñoso con la niña haciendo una voz chillona y moviendo el
muñequito como si de este saliera la voz. Daniel empezó a imaginarse en los
jardines de la Mal Querida ,
corriendo detrás de Ágata ya crecidita y detrás de él otra pequeñita de
cabellos rojizos y ojos verdades que era evidente que era la hija de Camila,
Luego se ve que entra Camila a la escena, corriendo detrás de la pequeñita
cuidando de que no se fuera a caer, ya que sus pasitos aun no era muy firmes.
En ese momento entra la enfermera con el biberón y toma a la niña de los
brazos de Dante, agradeciéndole su ayuda mientras deparaba el biberón, Dante se
la entrego dándole un besito en la frente. Daniel aprovecho para hacerse notar
en la sala diciendo que se veía muy bien como papá y aconsejándole que tal vez
ya era hora de que pensara en hacer una
familia.
-Ay hermano, que te puedo decir. No he vuelto a encontrar una mujer que
me llene como…
-oh si, esa mujer, la misteriosa mujer que te robo el corazón y que su
corazón era de otro. Animo hermano, tal vez aquí puedas encontrar el amor,
México esta lleno de mujeres divinas.
Daniel le puso un brazo al hombro como dándole ánimos, el conocía la
historia de la mujer que siempre a amado, pero lo que no sabe es que esa mujer
es Miriam, su primer esposa. Dante intentando cambiar un poco el tema, le
pregunto a Daniel como estaba Camila, le dijo que se había enterado de lo
sucedido en la cocina, Daniel con una sonrisa mas que en su boca, la tenia
en su mirada, le contó que estaba embarazada, Dante le dio mucho gusto por el y
lo felicito dándole un fuerte abrazo efusivo.
-¿Por que están tan contentos?- se escucho la voz de Miriam que venia
bajando las escaleras con una sonrisa de verlos a ellos contentos.
Daniel se quedo en shock por unos segundos, tratando de pensar que
decirle, pero Dante entro al rescate respondiendo:
-Daniel me esta felicitando por que le dije que he decidido conquistar a
una mujer y tener una familia.-
A Miriam le dio mucho gusto también escuchar esa noticia, la cual se le
acerca para felicitarlo igualmente dándoles una fuerte abrazo y un beso en la
mejilla en el cual por accidente, casi se rozan sus labios. Dante y Miriam se
pusieron un poco nerviosos por lo ocurrido con el beso, pero Daniel, pareció no
haberlo notado, o no darle importancia, la mirada a su amigo fue mas de
agradecimiento por haberle inventado a Miriam una escusa.
De vuelta en la cabaña de Camila, estaba Rodolfo y Mariano acomodando
unos tubitos que contenían muestras de sangre de los toros, Camila ordeno a
Rodolfo que los llevara inmediatamente al laboratorio para saber lo que
sucedía. Mariano aprovecho que el capataz salio dejándolos solos para hablar
con ella sobre sus sentimientos. El le dejo en claro que sabia que sabia ella
amaba a Daniel, pero su estrategia era tratar de que se diera la oportunidad
con el para tratar de olvidarlo, que él jamás la lastimaría y que solo viviría
para hacerla feliz. Entonces Mariano saco la cajita que contenía el dije,
Camila lo vio y le vino el recuerdo de los dijes con las iniciales “C” y “D”
-Mariano, yo…-
-No digas nada aun Camila, solo piénsalo, de cualquier forma este dije
es tuyo y si un día me elijes, solo bastara que te lo pongas para saber que me
haz aceptado.-
-Mariano, perdóname, pero no quiero darte ninguna esperanza, en verdad
siento mucho no poder ofrecerte lo que te mereces, pero hoy mas que nunca
Daniel y yo nos estamos aferrando a nuestra relación por que… Por que estoy
esperando un hijo de Daniel!.-