DÉCIMA PARTE
Cuando Miriam y Dante entraron a la casa, Daniel estaba en
la sala esperándolos para saber como les había ido, lo primero que hiso fue
tomar a la bebé de los brazos de Miriam chiqueándolo y dándole besos por el
gusto de verla de nuevo. Miriam por un momento se quedo esperando a que el la
saludara también por haber llegado, pero a Daniel se le escapo por un momento
hasta que segundo después, se acerco a ella y le dio un beso en la mejilla.
Miriam acepto el beso de Daniel muy sin ganas y volteo a ver a Dante como para
ver si se había dado cuenta de lo frio que se había portado como ya se lo haba
platicado.
-Y que tal, como les fue?- Pregunto Daniel
-ah muy bien, fuimos a dar una vuelta por el pueblo y
después a comer en el hostal de Amanda- Le contesto Dante tratando de entablar
una conversación.
-Si, solo que yo vengo exhausta, así que si me disculpan, me
iré a dormir temprano, no te molesta verdad Daniel?- Le preguntaba Miriam
mientras tomaba a su hija en brazos.
-No déjamela, yo le acuesto al ratito, quiero estar un
ratito mas con ella.-
-No señor, esta señorita ya se tiene que dormir también, no
quiero que se mal acostumbre a dormirse tarde como el papá-
Entonces Miriam tomo a la bebé y se fue a dormir. Mitras
tanto Dante y Daniel se quedaron en la sala platicando. Cuando Daniel se
aseguro que Miriam ya no estaba cerca, le cambio el semblante al dirigirse a su
amigo.
-Que paso, como te fue, si fueron al doctor? Que te dijo?-
Le pregunto Dante
-Amigo, felicítame!!- le decía Daniel con una sonrisa.
–Gemelos, Camila esta esperando gemelos-
-Enserio, wow, esa si que es una gran noticia, muchas felicidades!! – Dante le dio un gran abrazo
-Ahora si no me voy a perder de ningún momento, quiero estar
en todo, cada visita al medico, cada antojo, TODO!-
-Hay hermano, no te quiero apagar esa felicidad, pero has
pensado como le vas a hacer? Por que no podrás estar al pendiente de las
necesidades de Camila sin que Miriam se de cuenta, y tampoco creo que Camila
quiera vivir así. Además, creo que no te
estas dando cuenta, pero es tan evidente tu comportamiento con Miriam.
-Si tienes razón, pero es que en verdad no se que hacer.-
Dante se quedo callado, no había respuesta correcta que le
ayudara a hacer lo mejor para todos sin que nadie saliera lastimado, fuera como
fuera, la que parecía tener mas de perder es Miriam, y Dante con el gran amor
que le tiene, estaba a punto de abrirse con Daniel acerca de sus sentimientos,
pero no era fácil, podía perder su amistad y sobre todo el poder estar cerca de
Miriam aunque fuera como solo su amigo.
-Oye Daniel, que pasaría si Miriam conociera a alguien mas?-
-Como? … si se enamorara de alguien?-
-Pues si –
Daniel lo pensó por unos segundos, realmente nunca se había
imaginado esa posibilidad, y verla a ella con otro hombre no le resultaba lo
mas fácil de imaginar, tal vez eran celos, pero simplemente no quiso
contestarle, solo movió su cabeza como queriendo borrar la imagen.
-No… no se.
-Y si fuera Camila? – Le pregunto Dante Pero la respuesta a
esa pregunta fue mas inmediata, como por instinto quitas la mano cuando te
estas quemando.
-NO! Me muero!- fue su respuesta inmediata
-Es mas que claro a quien amas mas.-
-Bueno si, si Miriam se enamorara de un buen hombre que la
amara tanto, la respetara, yo me quedaría tranquilo. Tendría que ser un hombre
tan perfecto para ella.-
-Hay Daniel, hablas como si estuvieras hablando del futuro
marido de tu hija, con todo lo perfecto que debe ser, como si ningún hombre se
la mereciera. Eso ya no es amor, es solo cariño… - Dante se quedo callado, se
empezó a poner nervioso como ansioso de
decirle algo. Se armo de valor y empezó a hablar.
-Daniel… Quiero decirte algo que se que podrían cambiar las
cosas entre nosotros. Pero te considero mi mejor amigo, y por esa amistad que
tenemos, quiero decirte la verdad.-
-Que sucede Dante?-
-Estoy enamorado de Miriam. .. La verdad es que siempre lo
he estado, y por ese mismo amor que le tengo siempre la he respetado, sobre
todo por que se lo feliz que era tu lado por eso calle y hubiera callado toda
mi vida si ella fuera feliz. Y si me atrevo ahora a decírtelo, es por que se
que ya no es feliz, y me duele verla asi.-
Daniel se quedo callado, como tratando de asimilar las
palabras que acababa de escuchar, se llevo la mano a la barbilla. Su mirada se
puso seria. Después de unos segundos lo miro a los ojos.
-No se que decirte- Le respondió Daniel con un tono seria y
algo preocupado. –En verdad no tenia idea de tus sentimientos-
-No, claro que no, no tenias por que saberlo, yo te quiero
mucho a ti y a ella y jamás me atrevería a hacer algo que los perjudique. Solo
que ahora las cosas han cambiado. Y no quiero que lo veas como un reto, pero si
tu tienes a Camial… yo quiero luchar por el amor de Miriam. Pero si tu me dices
ahorita que te vas a quedar con Miriam, y que la vas a hacer feliz como era
antes, te juro que jamás me meteré en tu vida de nuevo. De otra forma quiero
que sepas que voy a hacer lo posible por conquistarla y hacerla feliz.
Daniel parecía molesto, su mirada era desafiante, Dante por
su parte se veía firme en su decisión y hablo sin titubeos. –Dante, eres un
buen hombre y sabes que a pesar de la situación, yo defendería a Miriam sobre
lo que fuera.- Daniel comenzó a cambiar su semblante, empezó a sonreírle a su
mejor amigo y continuo diciéndole: -No hay mejor hombre que tu. – Daniel le dio
una palmada en el hombre con una ultima sonrisa y se dio la media vuelta y se
fue de la sala.
Daniel subió a la recamara de la bebé y al entrar intento no
hacer ruido para no despertarla, pero su sorpresa fue verla que estaba muy
despierta y al parecer inquieta, la enfermera que la cuidaba estaba junto a
ella entreteniéndola con un juguetito y tratando de darle un biberón mientras
estaba en su cunita, Daniel se acerco a ella y la levanto de la cuna.
-Ay señor, la niña no se quiere dormir, anda bastante
inquieta.-
-No te preocupes, me la voy a llevar a dar una vuelta para
ver si se relaja- Le contesto Daniel mientras que la abrazaba haciéndole
cariñitos. –La señora ya se durmió? – le pregunto
-Si señor, hace ratito, me dijo que estaba cansada y que se
acostaría temprano. Yo creo que por eso la niña no quiere dormir, aun es
temprano.
-Bueno, pues esta señorita y yo nos vamos a dar una vuelta
por el rancho. Le podrías preparar un biberón para el camino?-
La enfermera bajo a la cocina mientras que Daniel le ponía
una ropita mas caliente por que pensaba salir un rato de la casa con la bebé.
Una vez que la abrigo bien bajo a alcanzar a la enfermera con el biberón y
salió de la casa.
Mientras tanto, Camila seguía en la computadora, a un lado
de ella estaba Maja que se entretenía con un hueso que mordisqueaba con
singular gusto. A Camila re resultaba muy tierno y divertido verla como
disfrutaba su huesito. De pronto Maja subió la cabeza como si algo mas le
llamara la atención, luego se levanto y camino hacia la puerta, Camila se
levanto también intrigada por lo que pudo haberle llamado la atención a Maja.
De pronto se abre la puerta de la cabaña y entra Daniel junto con Ágata.
-Hola buenas noches, mira quien vino a visitarte- entro
Daniel diciendo en un tono cantadito.
-Holaaa- contesto Camila contenta de ver a la niña. –Pero
que hacen aquí a esta hora. Esta haciendo frio, por que la sacas así.-
-Yo me cubrí muy bien para venir a visítate- Contesto Daniel
haciendo la mímica como si la voz fuera de Ágata.-
Daniel, Ágata y Camila se quedaron en la cabaña platicando y
jugando, se quedaron los tres en la cama, cada uno a una orilla de la cama y la
bebe en medio cuidando de que no se fuera a caer. Daniel tomo la manita de la
bebé y la puso sobre el vientre de Camila y le dijo: “Mira hija, aquí están tus
hermanitos, diles hola hermanitos” – Camila se conmovió que se toco el vientre
y miraba a Agata, imaginando que pronto
también estarían jugando con ella también.
La niña pronto se quedo dormida en medio de Daniel y Camila,
Daniel también parecía adormilado. Los dos estaban ahí con los ojos cerrados
mientras que Camila los miraba, se veían tan parecidos, no había duda de que
Ágata si fuera su hija, es tan parecida a el, aunque también tiene los delicados rasgos de Miriam.
Camila los miro un poco mas y después cerro sus ojos, tomo
entre sus dedos la mano de Daniel y se quedaron dormidos los tres juntos.
Por la madrugada empezó a llover muy fuerte, Daniel, Camila
y Agata seguían dormidos, pero fue por un fuerte trueno que la bebé se despertó
llorando, despertándolos, fue entonces cuando se dieron cuenta de la hora que
era y que la bebe estaba fuera de su cuna, y con la lluvia no había forma de
entrar a la cas. Daniel se levanto intentando consolar a la pequeña, pero no
dejaba de llorar, Camila se levanto y tomo a la bebe de entre los brazos de
Daniel, la recostó sobre su pecho y con
suaves movimientos de arriba abajo, logro que se volviera a dormir. Él se quedo
sorprendido de lo natural que le resultaba a ella eso de los bebés.
-Vas a ser una estupenda mamá-
Después de un rato, la lluvia se había terminado, entonces
aprovecho Daniel para poder llevarse a la bebe a su cunita de vuelta en la
casa. Gracias a la lluvia, el ambiente se había puesto mucho mas frio, así que
Daniel tomo a Agata en su pecho y Camila le puso una cobijita verde que tenia
sobre su cama para poder protegerla mas del frio, la tapo completamente que no
se podía ver. Ya luego que entro a la
casa, le llevo a su cuna y la tapo con la misma cobijita que Camila le había
dado para cubrirla.
La mañana siguiente, Miriam se había levantado, Daniel
seguía dormido profundamente a su lado, nunca se dio cuenta que el no había
estado ahí toda la noche. Entonces se salió de la recamara para ir a darle los
buenos días a su hija que también ya había despertado. La enfermera estaba por
cambiarle el pañal.
-Deja, yo se lo cambio, si quieres vele preparando su leche
por favor- le dijo a la enfermera. Y cuando tomo a la bebé se dio cuenta de la
cobija extraña que estaba ahí, pero no le dio mucha importancia y termino de cambia a su hija. Entonces entra
Daniel que también había ido a darle los buenos días.
-Oye Daniel, tu le pusiste esta cobija a Agata-
Daniel la miro dándose cuenta que era la de Camila y le
contesto. –Si, es que anoche empezó a llover y empezó a hacer mas frio así que
saque una cobija extra para taparla por que pensé que tendría frio.-
La respuesta complació a Miriam. –Bueno Daniel, cuídala
poquito, voy a bajar con la enfermera para traerle su biberón, ahorita regreso-
Daniel tomo a la bebe y empezó a menearla como lo había hecho Camila esa noche.
Daniel empezó a platicar con su hija, a hacerla cómplice de
la travesura que habían hecho en la noche de escaparse de la recamara para ir a
visitar a Camila, le empezó a platicar de lo buena que había sido al prestarle
su cobijita y de lo hermosa que se veía cuando la cargaba. En ese momento
Daniel no se había dado cuenta que Miriam venia ya de regreso y entonces empezó
a escuchar:
-Muy pronto vas a poder jugar con tus hermanitos por todo el
rancho, y los vamos a ensenar a montar caballo, vas a ver que te va a encantar
montar caballo y junto con tus
hermanitos se van a poder ir a dar la vuelta por toooooda la Malquerida.-
-De que hermanitos hablas Daniel?- Interrumpió Miriam
entrando a la habitación de Ágata.
Awww Que Lindo! :D Me Gusta Ya Quiero La Parte 11 Que Pasara? Rapidooooooooooooooo! :D
ResponderEliminarOmfg!!!!! Porfa ya sube la parte 11 jajajja cada dia se pone mejor!!!!!!
ResponderEliminarLeí ayer todo lo que has subido y la verdad es que es muy bueno!! Caray no nos dejes asii jajajaja
ResponderEliminarahhh por dios que explicación le dará daniel ya quiero la otra parte
ResponderEliminarEsto se est poniendo bueno mirian ya escucho :) aver que dice daniel oblo niega jajajajaja estoy bien picada . Lo leo siempre para ver si ya subistes el nuevo . Felicidades te mando besos y ya la parte 11 porfas
ResponderEliminarya queremos la parte 11 me encanta
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