viernes, 7 de septiembre de 2012







OCTAVA PARTE

            De vuelta en la Malquerida, Daniel y Camila llegan  juntos ya en la madrugada, apenas comenzaba a verse los primeros rayos del sol,  el taxi que los deja en la entrada del rancho.  El acompaña a Camila a su cabaña.

-Mejor vete Daniel,  mejor nos vemos mas tarde, quiero descansar un poco.

-Esta bien- le contesto Daniel sin mucho animo de irse, pero se acerca a ella para tratar de darle un beso en los labios de despedida, pero Camila se voltea, entonces Daniel al verse rechazado, solo alcanza a darle un beso en la frente la cual Camila acepto, Daniel se sintió algo triste por no haber podido besarla, pero no se fue de la cabaña sin antes agacharse al nivel del vientre de ella y sin pedirle autorización, le da un beso en su estomago. –Hijo cuida a tu mami, Te quiero.- le dice y se va. Cuando Daniel cierra la puerta Camila se toma el vientre y empieza a llorar de nuevo mientras lo veía partir.

                Ese mismo día mas tarde, ya que había amanecido y Camila había aprovechado a dormir un par de horas, se incorporo con Rodolfo y todos los demás muchachos para saber como iban las cosas, Rodolfo le conto que había podido vacunar ya a la mayoría pero que aun quedaban algunos que esperaban terminar lo mas pronto posible, Camila se sintió aliviada y durante toda la mañana ayudo a vacunar algunos toros que faltaban. Pero de pronto las nauseas no la dejaron seguir, empezó a sentirse mal y decidió parar, tratando de no alertar a los muchachos por su situación, solo le pidió que siguieran,  y ella se fue de nuevo a su cabaña.

                Mientras Camila descansaba en  su recamara, alguien toca a la puerta, era la voz de Miriam que le preguntaba si podía pasar. Camila se levanto arreglándose un poco el cabello y le abrió la puerta.
-Perdon Camila, te agare en un mal momento?- le pregunto Miriam apenada

-No, claro que no, solo estaba descanzando un poco, traigo un poco de nauseas-

-oh si, recuerdo los síntomas, son horribles. Pero entonces si quieres vuelvo luego para dejarte descansar.-
-No te preocupes Miriam, ya estoy mejor.- Le decía Camila mientras que con un gesto con su brazo le ofreció sentase en uno de los sillones que están a la entrada de la cabaña. Miriam se sentó, y espero a que Camila hiciera lo mismo para poder platicar.

-Camila, perdón por venir, pero necesito hablar con alguien, yo aquí no tengo amigos y con Daniel no puedo platicar sobre esto, además se que como mujer me puedes entender.-

-Que sucede?-

-No se si sepas, no se que tanto sepas sobre Daniel y sobre mi, pero desde que llegamos el es muy diferente, muy distante, no es el mismo Daniel apasionado que estaba en Chile, ya ni me toca, y por mas que le pregunto que es lo que sucede, parece que ya no me tiene confianza. .. Yo vine a preguntarte si sabes que pueda estarle pasando, si hay algún problema del cual le pueda estar afectando?-

              Camila se tomo unos segundos antes de contestarle, no supo que decirle, nunca se espero que ella le preguntara algo semejante. Era obvio que no podía decirle la verdad, no era el momento ni su lugar de hacerlo, si se tenía que enterar era por el mismo Daniel. En los ojos de Miriam había dolor, el dolor de la incertidumbre de sentirse alejada de su amor y de que algo lo podía estar alejando de ella sin poder detenerlo.

-No Miriam, no se, discúlpame, no sabría decirte que este pasándole.-
-ah que pena, tenia la esperanza que tu que convives con el, tal vez te hubiera dicho algo. Pero esta bien, tal vez soy yo, quizás las cosas vuelvan a la normalidad muy pronto cuando volvamos a Chile.-
Camila solo asintió con la cabeza, tratando de disimular el dolor que le causo con sus palabras de llevárselo a Chile. Entonces Miriam se levanta del asiento para irse, caminando hacia la puerta muy lentamente como si tuviera algo mas que decirle pero simplemente no se atrevía. Ya al llegar a la puerta, de pronto se dio la vuelta para mirar a Camila y con pena en su vos y su mirada le dice:
-Camila, puedo confiarte algo?-

               Ella asombrada por la noticia le contesta con la cabeza que si, y la miro intrigada a los ojos pensando que pueda ser eso que la tiene tan nerviosa.
-Se que puedo confiar en ti, se nota que eres una gran mujer y necesito contarle a alguien esto. .. Ayer, Dante y yo nos besamos!... fue algo del momento, yo me sentía frustrada con lo que esta pasando con Daniel y él, pues se porto tan atento conmigo que nos confundimos.

             Camila se quedo callada, no supo que responder, solo se quedo asombrada con lo que acababa de escuchar. Miriam la observo y comenzó a preocuparse por su reacción.
-Perdóname, perdóname, no debí, se que eres muy buena amiga de Daniel, no fue mi intención ponerte en esta posición, creo que hice mal en decirte esto, discúlpame-
-No, esta bien, no te apures, yo no le diré nada a Daniel.- Camila no supo que decir, Miriam por su parte noto que su confesión la puso incomoda y no quiso seguir con el tema, confió en que no le contaría a Daniel y salió de la cabaña apenada.

               Al dia siguiente, Miriam y Daniel se disponían a desayunar en la mesa de la Malquerida,  solos como siempre lo habían hecho, pero llego Dante a interrumpirlos, a un lado de el un par de maletas.
-Daniel, Miriam, vengo a despedirme, me regreso a Chile- Les dijo Dante muy decidido.
Daniel al verlo ya con maletas mas que decidido a irse, le pregunto por que se iba, y sin notar la mirada discreta que le hiso a Miriam, le contesto que tenia asuntos pendientes por hacer en Chile, Daniel  intento de nuevo convencerlo, pero el parecía mu decidido, echándole unas miraditas a Miriam que hasta ese momento no había hecho ningún comentario. Pero de pronto Miriam se levanta y se acerca a ellos y con un tono serio le dijo que no se fuera, que por favor se quedara, que buscara la forma de quedarse por que si no ella se sentiría muy sola. Dante la miro a los ojos intentando ver en ellos si era sincera con su deseo de que el se quedara y fue hasta que vio una pequeña chispa de desesperación por que se quedara que le dio un poco de esperanza y con una sonrisilla acepto quedarse. Cuando ya lo habían convencido, entonces entra Camila que al ver las maletas que quedo intrigada de lo que estaba sucediendo, Daniel le explico que Dante se quedaría unos días más. Camila sonrió a Dante y le agradeció que se quedara, su agradecimiento sonó sincero.
               
                  Llegando la noche, Miriam y Daniel se preparaban para acostarse, Miriam se ponía un poco de crema en las manos mientras se sentaba de un lado de la cama, mientras que Daniel salía de lavarse los dientes sentándose del otro lado de la cama, ambos platicaban sobre Dante y su decisión de quedarse y de lo bien que les hacia tenerlo cerca.
                
                 Ambos se acostaron, esa noche Miriam solo le dio un tierno beso en la mejilla a Daniel y con un último “buenas noches”, se acostó. Daniel solo se quedo recostado con los ojos abiertos en la obscuridad de esa recamara. A los minutos se di cuenta que Miriam dormía profundamente, generalmente lo hacia gracias a sus pastillas que le recetaron que no la harían despertar hasta la mañana siguiente. Entonces Daniel se levanto lentamente tratando de no moverla mucho y salió de la habitación.

                Por su parte Camila seguía estaba en su cabaña aun en la computadora, revisando algunos archivos sobre los toros vacunados, y cuantos habían sobrevivido. Despues de un rato, se sobaba el cuello por cansancio y cerro la tapa de su laptop y se dirigió a su cama. Sin saber que Daniel estaba afuera de su ventana viéndola como se desnudaba para ponerse la pijama, luego ella quito algunas almohadas de su cama y jalo la cobija para poder meterse en ella, una vez que se acomodo, apago la ultima lámpara para dormir. Se dormía sola una vez mas, cuando apenas unas horas la había tenido en sus brazos.

                Daniel abrió la puerta de la cabaña, tratando de no hacer ruido, pero fue la puerta de la recamara la que abrió con mucho mas cuidado  para no asustarla, se acerco a la cama y se acostó junto a ella, Camila se acababa de quedar dormida cuando sintió la presencia de alguien mas en su cama, pero antes de que volteara a ver quien era, unos fuertes brazos la rodearon, entonces no tuvo necesidad de verlo para saber que era su Daniel, sin duda era el. Camila no dijo nada, ni si quiera lo volteo a ver, solo se acomodo un poco mejor entre sus brazos y cerro sus ojos para dormir de nuevo,   entonces se escucho su voz que le dijo al oído “Te amo” y así el también se quedo dormido.


AVANCES PARTE NUEVE:
Dante le hace una confesión a Daniel que lo deja pensativo. Camila por fin va al medico y le da una noticia.


5 comentarios:

  1. jajajaja eres muy buena escribiendo me encanto esta parte :)

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  2. Me encanto esta parte, como que Miriam se siente muuuy amiga de Camila jajaja y mejor no hubieras dado el avance jajaja ahora me dejaste con unas ganas inmensas de leer la parte nueve!!!!

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  3. se que es mucho pedir pero quiero ya leer la parte nueve , de verdad que soy mega adicta a leer tu historia , me gusta mucho que lo hagas por que me gusta mas que la novela ,ya que aqui si avanza siempre , es genial mil gracias por escribirlo

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  4. me encantoooooooo me derrito en este blog ya qiero la parte nueve :D

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